Loengry

No tengás miedo, viví.

No tengás miedo de no ser lo suficientemente bueno en lo que hacés, en lo que te gusta. Tampoco de no obtener los mejores resultados y no tener una compañía que factura millones al año.

No tengás miedo porque no te graduaste con honores en la universidad. Tampoco tengás miedo porque no estás ejerciendo un cargo de poder y sos un número más en la lista de colaboradores y talentos de la empresa para la cual trabajás o si sos uno más en la universidad.

No tengás miedo de no ser tan bueno tocando guitarra, componiendo una canción o inclusive cantándola. Tampoco por no ser extraordinario. No tengás miedo de ser normal o estar en el promedio.

No tengás miedo de no representar tu ciudad o tu país. Tampoco de no ser bueno con la lectura o porque no sabés escribir bien. Nunca tengás miedo de ser tratado con subestima.

No tengás miedo porque yo lo tuve y nada mejoró. No soy asombroso ni mucho menos extraordinario con lo que hago, con lo que me gusta o con lo que represento. Simplemente soy, vivo y disfruto sin tener que lidiar con esa competencia de ser el mejor o lo mejor.

Mi consejo para vos es ése, viví sin tener miedo de ser quien sos y no tener algo porqué brillar. Viví sin tener miedo de ser una persona promedio. Viví sin tener miedo de ser la persona que no querías ser. Pero sobre todo viví sin tener miedo de vivir por lo que los demás esperan de vos. Viví y tomate un café, sino te gusta tomate lo que querás. Eso es vivir.

Nunca, pero nunca, vivás con miedo.